Cerrar ciclos desde la gestión emocional permite abrir el futuro con mayor claridad, presencia y coherencia interna. Esta experiencia dejó como mensaje central que la verdadera transformación ocurre cuando nos permitimos sentir, amar y trascender.
Cerrar ciclos desde la consciencia emocional
En esta jornada se sostuvo un espacio terapéutico y simbólico para cerrar ciclos con consciencia, honrar lo vivido y permitir que el cuerpo, la emoción y la mente se alinearan para recibir un nuevo ciclo desde la apertura del corazón. Desde las primeras horas de la mañana, el clima y el entorno natural nos guiaron a bajar el ritmo, salir del modo automático y habitar el presente.
El yoga como puente entre cuerpo y emoción

Iniciamos siendo guiados por Milena Calderón a través de una sesión de yoga consciente enfocada en regular el sistema nervioso, activar la respiración y devolver al cuerpo su capacidad de escucha. A través del movimiento suave y la atención plena, los asistentes pudieron liberar tensiones acumuladas y disponerse al trabajo emocional y terapéutico del día.
Nos acompañaron las esencias naturales y minerales de Amaralia Belleza Salvaje, quien aportó una experiencia sensorial profunda a través de la conexión con los sentidos y facilitando un estado de mayor presencia, enraizamiento y apertura emocional.
Desde la mirada de la psicología transpersonal, el cuerpo se convirtió en un canal de integración, donde la experiencia física facilitó procesos internos de conexión, presencia y coherencia.
Sanación vibracional y terapia sonora profunda

Uno de los momentos más significativos del encuentro fue la sesión de sanación vibracional con cuencos tibetanos y gong, dirigida por Ann Bessudo. Más que “hacer algo”, el Sound Healing es una práctica terapéutica que utiliza vibraciones sonoras, guiando al cuerpo a dejarse llevar por las vibraciones para actuar sobre el sistema nervioso y promover la liberación de tensiones internas, emociones acumuladas y patrones de estrés.
Los participantes fueron transportados por medio de los sonidos a un estado de meditación profunda, descanso y conexión interna, acompañando procesos de sanación emocional y reconexión espiritual.
Espacio de charla y reflexión emocional

El encuentro incluyó un círculo de compartir consciente, en donde los participantes reflexionaron sobre el año a culminar. Posteriormente, Danilo Cotrino, director de Yerbabuena SAT compartió unas palabras, en donde se reflexionó sobre el Camino del Héroe, quien encuentra el valor para enfrentar sus miedos, invitando a cada uno a reconocerse como protagonista de su propia historia.
Alimentación consciente: nutrición sensorial y regulación emocional

El evento fue acompañado por una propuesta de cocina consciente para el alma, liderada por Sofía Rodríguez, cuidadosamente preparada para sostener la energía y acompañar los procesos emocionales vividos durante la jornada.
Desde una mirada terapéutica y sensorial, el alimento fue ofrecido como un acto de contención, donde texturas, aromas y sabores invitaron a ralentizar, percibir y habitar el cuerpo con mayor amabilidad. La alimentación se integró así como una herramienta de autorregulación emocional, reforzando la idea de que nutrirse es también una forma profunda de cuidado psicológico y espiritual.
Soltar, intencionar y abrir el nuevo ciclo

El cierre del encuentro estuvo marcado por un ejercicio de identificación de propósitos e intenciones alineadas con el sentir interno.
Este espacio culminó con una actividad lúdica y simbólica, en la que los participantes pudieron entregar al fuego sagrado lo que querían soltar y transmutar este año, así como enviar sus deseos al aire, como un gesto de confianza, ligereza y apertura al nuevo ciclo.

A través de este acto colectivo, se facilitó un cierre honesto y amoroso de aquello que ya no se desea cargar, permitiendo que cada intención fuera entregada con gratitud y presencia. Fue un momento de conexión profunda, alegría compartida y sentido, que selló la experiencia desde la coherencia emocional y el corazón abierto.
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